sábado, 23 de julio de 2011

Nieve

Ella decidió salir de su casa en dirección al jardín. Al abrir la puerta y ser recibida por el aire frío, miró hacia el cesped. Había desaparecido. En su lugar, un manto blanco aparecía, dejando una estela a su lejos, con el viento arremolinado en curiosas espirales.
La niña miró expectante, dio unos pasos más allá y plantó sus pequeñas botas sobre la nieve. Oíase en sus pisadas el crujir de la nieve, destrozando esos cristales de hielo.
Extendió el brazo derecho, con la palma hacia arriba. Una palma rosada, redonda, sin estrías. Poco a poco su mano acumulaba pequeños copos que se agrupaban unos junto a otros, recorriendo las marcas de su preciosa mano.
Levantó la vista, alcanzando a ver el cielo entre diminutos rayos en forma de nieve que le atacaban lenta y paulatinamente. Mantuvo la mirada firme un rato. Después, decidió girar sobre la punta de sus pies y tomar el camino de vuelta a su casa. Una sensación cálida le reconfortó una vez traspasado el umbral.
Fuera, la nieve seguía cayendo...

Bloom-Withno

No hay comentarios: